I.
Notas Introductorias
El pacto fiscal (mejor llamado
pacto tributario), se inscribe dentro de la política fiscal del estado dominicano,
donde intervienen los ingresos y los “gastos” del estado. Según el mismo
gobierno, el pacto procura “realzar la
eficiencia, transparencia y equidad de la estructura tributaria y elevar la
presión tributaria (Impuestos/PIB) para viabilizar el logro de los objetivos de
desarrollo formulados en esta Estrategia
Nacional de Desarrollo 2030”[1].
Es decir, que bajo las condiciones actuales, el estado no es capaz de generar
el desarrollo nacional, por tanto necesita dinero que se buscara por medio de impuestos.
Estos impuestos, según los economistas clásicos, afectan
negativamente la pendiente de la demanda agregada (DA={c(1-t)-m}Y+I+G+X)
creando un exceso de oferta de bienes (se produce más de lo que se demanda)
como efectos inmediatos de corto plazo.
Al
igual que una persona física o una empresa, el estado puede manejar sus saldos
financieros moviendo el ingreso o sus gastos. Es decir en caso de buscar un
saldo menos negativo, el gobierno se plantea “reducir gastos” e incrementar sus
ingresos, por tanto las preguntas de partida serian ¿de dónde proviene y en que
se gastan los recursos del estado?...
II.
Ingresos
y gastos (Si tenemos más, ¿porque el déficit?)
Empecemos por el gasto, que
para el caso dominicano se olvido de los
cambios estructurales que sufrió la economía durante los últimos 50 años,
primero pasó de una economía agrícola a una economía de zona franca y turismo
(1970-1980, por tanto cambian los sectores de desarrollo) y luego a una
economía de servicios con fuerte dualidad económica (desde 1990). Es decir, que
el gasto no ha tomado en cuenta las zonas menos favorecidas, ignoradas por el
sistema económico. Aquellas zonas son las menos importantes en la
estructura del gasto tradicional, por tanto incentivó la dualidad económica
regional y la concentración de personas pobres en las ciudades, al tiempo en
que aumenta la proporción del gasto corriente con relación al gasto de capital.
De 2005 a 2011 el gasto aumento 108.6%, con un incremento de 44.2% en
términos reales. Tan solo de 2005 a 2008 el gato creció en 87.2%. Este
incremento del gasto no se corresponde con un uso más eficiente de los recursos
o una mayor cobertura en servicios del estado. “De 2004 a 2011 el gasto por transferencias corrientes se incremento
en 117.9%, representando las transferencias al sector eléctrico un costo de
US$4,653 millones.” Esta desorganización del gasto ha provocado que el
déficit fiscal proyectado a 2012 ronde el 8-12% del PIB, especialmente después
del gasto exorbitante de los primeros seis meses del año.
Solo en 2011, el gobierno se
gasto RD$23,801,784,584.99[2], de los cuales
la inversión en proyectos fue de solo RD$3,068,150,933.41 y la remuneración a
empleados de RD$6,024,737,936.23, sin comentarios pero se gasta más en nomina
que en inversión de proyectos. Unimos a este asunto, el peso de la deuda, cuando se observa que los gastos por deuda en
intereses y comisiones suman RD$2,244,996,893.97 (lo que habla del ritmo de
endeudamiento del estado) solo obsérvese como los gastos corrientes superan ampliamente
los gastos de capital o los gastos en educación son parecidos a los gastos en
transporte (El metro)… Destáquese que en transporte (con metro incluidos) nos
gastamos RD$3,021,534,946.01 mientras que en educación RD$3,648,055,006.92 y en
sueldos a empleados fijos
RD$4,482,453,181.50, la nomina publica es, por mucho, más elevada que el
gasto total en educación de la nación completa.
Solo se presenta la
clasificación funcional del gasto para destacar que el servicio total de la
deuda (intereses y amortizaciones) representa el 29.3% del gasto total del
gobierno, es decir que de cada 100 pesos que gasta el gobierno 30 tiene que
dedicarlo al servicio de la deuda pública que viene creciendo desde el 2000 a
un ritmo acelerado, Esto no sorprende si recordamos que la deuda viene
creciendo más que la economía, como se destaco en un artículo anterior. “Desde
el 2000 al 2011 la deuda pública total (solo sector público no financiero), ha
pasado de 3,243.5 a 16,593.0 millones de US$, es decir, que ha venido creciendo
a un ritmo promedio de 16.6% y se ha multiplicado por encima de 5 veces a su
valor inicial en el referido periodo. Nótese además que a partir de 2008 el
ritmo de crecimiento de la deuda se ha incrementado a un 22.6%, influenciado
por el crecimiento de la deuda pública interna que se multiplica por 10 durante
desde el 2000. Por lo que, el crecimiento de la deuda ha sido desde el 2009 y
en 2003 superior al crecimiento de la economía. Tal como sucedió en el
preámbulo de la crisis de la década perdida, aunque no en iguales magnitudes”[1].
Este ritmo de endeudamiento limita la capacidad del gobierno actual de seguir
adquiriendo deuda, lo que descarta esta opción de ingresos.
Cuadro 1
Republica Dominicana: Clasificación funcional del gasto 2011
Clasificación
funcional
|
Monto
RD$
|
(%)
porcentaje
|
SERVICIOS GENERALES
|
4,441,521,997.97
|
14.6%
|
SERVICIOS SOCIALES
|
11,537,355,738.32
|
37.9%
|
SERVICIOS ECONÓMICOS
|
5,287,638,385.70
|
17.3%
|
INTERESES DE LA DEUDA PÚBLICA
|
2,244,996,893.97
|
7.4%
|
PROTECCIÓN DEL MEDIO AMB.
|
294,987,747.03
|
1.0%
|
AMORTIZACION DE DEUDA
|
6,672,688,975.35
|
21.9%
|
Total
|
30,479,189,738.34
|
100.0%
|
Fuente: Ministerios de hacienda, “Clasificación
económica del gasto, devengado y aprobado 2011”
Por el lado del ingreso, el
estado tiene la capacidad de recibir transferencias y donaciones de terceros,
ya sean estados, organismos multilaterales o bilaterales, puede además aplicar
impuestos o endeudarse. Para analizar que ha pasado con los ingresos del estado
veamos como inicia el informe estadístico de la DGII en el 2011
“En
el año 2011, la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) recaudó la suma
de RD$206,141.1 millones, presentando un crecimiento de RD$22,301.2 millones
respecto al año anterior, lo que significa un aumento de 12.1%. Esto va en
línea con el crecimiento nominal de la economía, medido a través del PIB, el
cual cerró en 11.4% para el 2011. Asimismo, la DGII concentró el 74% del total
de ingresos del Estado.”[2]
Sin
importar el crecimiento económico y “pese
a que desde el 2004 a la fecha se han implementados al menos 5 reformas
tributarias (la última en junio de 2011), el déficit fiscal acumulado del
Gobierno Central en los 4 años y 8 meses
comprendidos entre el 2008 y el 31 de agosto de 2012, asciende a RD$332,875.4
millones, a precios corrientes.”[3]
Este enorme déficit fiscal se produce a pesar de que los ingresos
fiscales han estado aumentando, tanto en términos nominales como reales en los
últimos 8 años. “A partir de 2008 la
brecha entre ingresos y gasto se agranda debido a que no se ajusta el nivel de
gasto, en momentos en que si bien los ingresos mostraban un buen ritmo,
empezaban a dar señales de ralentización; sobre todo los no tributarios, por
efectos de la caída en los aportes de la Falconbridge”[1]. “El
mantenimiento del nivel de gasto no hubiese representado un problema si el
mismo se hubiese dirigido a evitar el
deterioro del nivel de vida de la población, a reducir las inequidades y a
aumentar el desarrollo productivo. Desafortunadamente, gran parte de los fondos
públicos se han destinado a actividades desvinculadas del bienestar colectivo.
El despilfarro ha sido evidente.”
“La expansión
desproporcionada del gasto ha generado un déficit fiscal de RD$101 mil millones
durante los primeros ocho meses del presente año, equivalente al 4.3% del PIB.
Este déficit prácticamente quintuplica el programado originalmente para todo el año, ascendente a RD$22 mil
millones (0.9% del PIB). Ante esta situación, fue
modificado el Presupuesto del Gobierno Central[1],
el cual fue elevado de RD$430 mil millones a RD$508.8 mil millones, es decir,
un incremento de RD$78.8 mil millones. Con las modificaciones introducidas, el
déficit del año sería RD$100.4 mil millones.”
III.
La propuesta del estado dominicano (Pacto
fiscal “Tributarios”)
Bajo estas
condiciones el planteamiento del estado ha sido promover “El pacto fiscal” buscando
incrementar los ingresos por medio de impuestos y reducir gastos innecesarios, “para poder lograr las metas de desarrollo
planteados en el plan nacional estratégico”. Es decir que son los impuestos el instrumento
elegido por el estado para promover desarrollo. Estos impuestos pueden, al
igual que el gasto fiscal, “influir sobre los niveles de de asignación y
distribución del ingreso por medio de la tributación a los distintos grupos, la
orientación del gasto social… ambas políticas van a depender del nivel de
recaudación lograda y de la estructura del gasto estipulada”.
La reforma inicia planteando
la modificación del artículo 296 del Código Tributario Dominicano, en su Art.
1, para grabar los salarios a partir de RD$399,923.00 (RD$ 33,326.92
mensuales) (esta estructura no es bastante significativa a la actual), no
obstante significa una leve reducción del ingreso real disponible de la
población, especialmente jóvenes profesionales de las zonas urbanas que son
quienes más cerca se encuentran de este límite inferior. Ahora bien una
variación de importancia se observa en “10% de los honorarios, comisiones y
demás remuneraciones y pagos por la prestación de servicios en general
provistos por personas físicas” que afectaría la prestación de servicios individuales
y la adquisición de ingresos de los sectores más vulnerables aunque no a
personas físicas particulares, por el carácter informal de esta actividad.
La reforma continúa,
ahora para afectar los Juegos de Azar y tragamonedas (impuestos a un vicio),
este caso se incluye dentro del análisis porque puede ser un factor social
sensible a cambios en los patrones culturales del pueblo. Es decir
(independientemente a las consideraciones éticas y morales que se tengan sobre
esta actividad) el impuesto afecta, principalmente a jóvenes y personas de
barrios más marginados, desempleados y con bajos niveles de educación.
Además se contempla
un impuesto de 10% a los certificados de inversión, lo que constituye desincentivo
al ahorro y afectaría el nivel de captación de los bancos, que se traduciría en
una menor disposición de créditos, especialmente para el consumo que es hacia
donde se ha ido especializando la banca dominicana. En el Art. 12, se gravan
las transferencias sobre préstamos otorgados por el sector financiero para
viviendas y solares siempre que este exceda al RD$1,000,000, es decir que el
costo transacción y adquisición de activos inmobiliarios se está incrementando
en casi toda la zonas urbanas del país, (dado el valor de las casas y solares
en las zonas urbanas), esto dificulta la adquisición de viviendas en un país
donde el déficit habitacional supera el millón de viviendas.
Se establecen
impuestos del 10% sobre las aguas minerales, gaseosas y refrescos. En el Art.
15, Se grava con 1% del valor a los vehículos de motor (como sustituto de los
marbetes), como un impuesto anual por circulación además en el Art. 16, En
adición al impuesto de registro o inscripción previsto en el Artículo 22 de la
Ley 557-05, los vehículos de motor estarán gravados según las emisiones de CO2
o los niveles de contaminación omitido, en este caso el reto del estado será
establecer una correcta medición de los niveles de emisión de los vehículos y
enfrentar una alta tasa de evasión esperada.
Se establecen
impuestos a las telecomunicaciones, el Art. 20, grava las telecomunicaciones con una tasa
superior en 10%, sector altamente demando por la población joven, “Los servicios de telecomunicaciones
incluyen, la transmisión de voz, imágenes, materiales escritos e impresos,
símbolos o sonidos por medios telefónicos, telegráficos, cablegráficos,
radiofónicos, inalámbricos, vía satélite, cable submarino, televisión por cable
o por cualquier otro medio que no sea transporte vehicular, aéreo o terrestre.
Este concepto no incluye transmisiones de programas hechos por estaciones de
radio y televisión.” El impacto de
este impuesto seria un encarecimiento
del ocio de la población joven, menor acceso al servicio de internet y mayores
costos operativos de las empresas.
En el Art. 17, Se
modifica el Artículo 1 de la Ley 112-00, de fecha 29 de noviembre del 2000,
para establecer un impuesto al consumo de combustibles fósiles y derivados del
petróleo despachados. Esto se traduce en lo que se traducirá en la variaciones
de costos de producción y transporte que podría afectar la población joven,
especialmente la trabajadora y a los estudiantes por medio de variaciones
(nunca negativas) de los precios de los pasajes.
El ITBIS aumenta dos
puntos porcentuales al pasar del 16 a 18%, el Art. 14 establece incluir 375 artículos
como mercancías gravadas con Impuesto Selectivo al Consumo, por ende se degrada
el poder adquisitivo de los consumidores que se acercan más a condiciones de
pobreza. Ademas el Art. 21, Encarece un grupo importante de
artículos del hogar (Alfombras, tinacos, tapicerías, acondicionadores de aite,
Bañeras Tipo jacuzzi, Los demás máquinas y aparatos sin equipo de
enfriamiento, Calentadores eléctricos de agua, Hornos de microondas,
tostadoras de pan, videófonos, parrilla y asadores, tocadiscos, aparatos de
grabación, relojes, entre otros), que sumado al encarecimiento del costo
transacción, mencionado anteriormente elevaría el costo de
equipamiento de las
viviendas.
IV.
Conclusión
Ahora bien, la
incidencia de la política fiscal dependerá, en última instancia de la capacidad
del estado de garantizar a la población políticas públicas de desarrollo que
potencialicen el capital humano a nivel nacional y revierta el efecto negativo
del plazo inmediato que se espera tras el alza de los impuestos.
En conclusión y desde una
visión más social, el pacto fiscal plantea la necesidad de un nuevo incremento
en el presupuesto 2012 de cerca de 30 mil millones de forma tan ligera que
parecería un incremento de 30 pesos, no se especifica claramente, salvo para el
gasto del 4% en educación cual es la estructura del gasto a seguir luego de los
aumentos impositivos, los recortes no parecen convencer la población que
observa inmutada, no se exponen las causas del actual déficit fiscal ni de los
saldos fiscales actuales, la pacto se ha propuesto de forma acelerada en un
plazo mucho más corto a lo planteado en la Estrategia Nacional de Desarrollo,
se continúan vendiendo los programas sociales que observan la pobreza desde un
enfoque de hogar (como solidaridad) y no como un problema estructural y
regenerativo, los impuestos sobre el ITBIS serán transferidos a los quintiles
de menor ingresos de la población, las señales de transparencia mostrada por el
gobierno no son lo suficiente contundente como para generar un golpe de efecto
en toda la administración pública, se han excluido importante sector sociales
del proceso de discusión. El pacto no garantiza el uso eficiente de los
recursos.
Twitter: @nerysramirez01
Referencias
-
Dirección general de
impuestos (2012): “Boletín estadístico, Enero-Diciembre 2011”
-
Ministerio
de Economía, Planificación y Desarrollo (2012); “Documento borrador del pacto
fiscal dominicano”.
- Ministerio de hacienda; “Clasificacion económica del gasto, devengado y aprobado 2011”.
-
Organizaciones sociales (2012); “El Pacto Fiscal y el Presupuesto 2013”.
Disponible en la web.
-
Ramírez, F. Nerys (2011);
“Primeros apuntes para un ejercicio de sostenibilidad, la deuda pública total”,
Disponible en http://Betaeconomia.blogspot.com
-
Rodríguez, Emmanuel (2012);
“¿Quién es el culpable del Déficit dominicano?, Disponible en http://economiadominicana.wordpress.com
(LOS TEXTOS EN COMILLAS
REPRESENTAN NOTAS TOMADAS DIRECTAMENTE DE OTROS ARTICULOS CITADOS A
CONTINUACION)
[1]
“Para el
ejercicio fiscal 2012, el Presupuesto General del Estado era de un monto global
sin consolidar de RD$480.9 mil millones,
compuesto por RD$430.0 mil millones del Gobierno Central y RD$50.9 mil millones
de las Instituciones Descentralizadas y Autónomas No Financieras y de la
Seguridad Social. El total de transferencias intragubernamentales ascendía a
RD$26.9 mil millones lo que arroja un Presupuesto General Consolidados de RD$454.0
mil millones.”
[1]
Tomado de: “El Pacto Fiscal y el Presupuesto 2013”
[1]
Ramírez, F. Nerys; “Primeros apuntes para un ejercicio de sostenibilidad, la
deuda publica total”, Disponible en Betaeconomia.blogspot.com
[2]
DGII: “Informe estadístico 2011”, Unidad de estudios económicos, Pag. 4
(Introduccion)
[3]
Organizaciones sociales; “El Pacto Fiscal y el Presupuesto 2013”
[1]
Pacto fiscal, revisar documento disponible en la web.